INTERVENCION EN CRISIS


INTRODUCCION

Hay momentos del ciclo vital relativamente apacibles y estables alternados con otros donde aparecen nuevas exigencias y demandas, necesit谩ndose un periodo de transici贸n entre los periodos o estadios del ciclo vital para adecuarse a estas. Se necesita tiempo para desprenderse de una situaci贸n pasada y adaptarse a otra nueva.

Otras veces los cambios por lo contrario reflejan turbulencia emocional y psicol贸gica y marcan un periodo de crisis: ya sean internos o externos enfrentan a la estructura mental y emocional de la persona con exigencias que sobrepasan la capacidad de adecuarse a ellos y sobreviene una crisis

Se quiebra el orden previo, lo que antes serv铆a para explicarla y resolverla resulta ineficaz, y a la vez, las nuevas alternativas nos llenan de temor y de desconfianza. Estamos en crisis

En un sentido amplio podemos decir que la vida es un estado de crisis casi permanente apenas interrumpido por lapsos de relativa inestabilidad

Una crisis va a aparecer en la vida de una persona cuando un determinado suceso amenaza con alterar su equilibrio personal, en sentido tanto favorable como adverso.

La situaci贸n de crisis va a depender de los recursos adaptativos del sujeto, pudiendo aparecer, bien en una situaci贸n estresante en la propia evoluci贸n del individuo (crisis evolutivas o esperables), o bien en otras en las que un suceso vital estresante las precipita.

Estas 煤ltimas son las denominadas "crisis accidentales" o crisis inesperadas o imprevisibles, en las que estar铆an incluidos tanto las crisis cotidianas como separaci贸n, perdidas, muerte, enfermedades corporales, como los desastres y las cat谩strofes.

Crisis seg煤n Albert Einstein

“No pretendamos que las cosas cambien si siempre hacemos lo mismo. La crisis es la mejor bendici贸n que puede sucederle a personas y pa铆ses porque la crisis trae progresos.

La creatividad nace de la angustia como el d铆a nace de la noche oscura. Es en la crisis cuando nace la inventiva, los descubrimientos y las grandes estrategias.

Quien supera la crisis se supera a s铆 mismo sin quedar ’superado’. Quien atribuye a la crisis sus fracasos y penurias violenta su propio talento y respeta m谩s a los problemas que a las soluciones.

La verdadera crisis, es la crisis de la incompetencia.

El inconveniente de las personas y los pa铆ses es la pereza para encontrar las salidas y soluciones. Sin crisis no hay desaf铆os, sin desaf铆os la vida es una rutina, una lenta agon铆a. Sin crisis no hay m茅ritos. Es en la crisis donde aflora lo mejor de cada uno, porque sin crisis todo viento es caricia.

Hablar de crisis es promoverla, y callar en la crisis es exaltar el conformismo. En vez de esto trabajemos duro. Acabemos de una vez con la 煤nica crisis amenazadora que es la tragedia de no querer luchar por superarla”.

Albert Einstein

QUE ES UNA CRISIS

Definici贸n de crisis: Una crisis es un estado temporal de trastorno y desorganizaci贸n, caracterizado principalmente, por la incapacidad del individuo para abordar situaciones particulares utilizando m茅todos acostumbrados para la soluci贸n de problemas, y por el potencial para obtener un resultado radicalmente positivo o negativo.

Crisis significa al mismo tiempo peligro y oportunidad

Una crisis es un cambio brusco o una modificaci贸n importante en el desarrollo de alg煤n suceso. Dichas alteraciones pueden ser f铆sicas o simb贸licas. Crisis tambi茅n es una situaci贸n complicada o de escasez.

Estado temporal de trastorno y desorganizaci贸n, caracterizado principalmente por la incapacidad del individuo para abordar situaciones particulares utilizando m茅todos acostumbrados para la soluci贸n de problemas y potencial para obtener un resultado positivo o negativo.

 

Principios Te贸ricos

Moos (1976) identifica 4 influencias te贸ricas en la teor铆a de la crisis. La primera es la de Charles Darwin sobre evoluci贸n y adaptaci贸n de los animales a su ambiente. Estas ideas permitieron desarrollar la ecolog铆a humana explicando los mecanismos adaptativos del ser humano con su medio. Una segunda influencia se basa en las teor铆as de la motivaci贸n y el impulso para el logro de la realizaci贸n (Maslow 1954 Rogers 1961). El enfoque de Erickson (1963) del ciclo vital del desarrollo proporcion贸 una tercera influencia para la teor铆a de la crisis; Y por 煤ltimo una cuarta influencia la tuvieron los estudios emp铆ricos sobre el estr茅s

TIPOS DE CRISIS

Las crisis pueden ser del desarrollo (esperables) o circunstanciales (accidentales, inesperadas o imprevisibles.)

Crisis del desarrollo:

Las crisis del desarrollo son m谩s predecibles y sobrevienen cuando una persona va cumpliendo etapas en su vida desde la ni帽ez a la senectud .Presentan una conducta indiferenciada y marcan un trastorno en el 谩rea intelectual y afectiva

·         Crisis del nacimiento e infancia

·         Crisis de la pubertad y adolescencia

·         Crisis de la primera juventud

·         Crisis de la edad media de la vida

·         Crisis de la tercera edad

Crisis circunstanciales:

Las crisis circunstanciales son inesperadas, accidentales y dependen sobre todo de factores ambientales: Abarcan una alteraci贸n ps铆quica y de la conducta ante perdida o amenaza de p茅rdida de los aportes b谩sicos (f铆sicos, psicosociales y socioculturales que est谩n interrelacionados)

·         Separaci贸n

·         P茅rdidas

·         Muerte

·         Enfermedades corporales

·         Desempleo

·         Trabajo nuevo

·         Fracaso econ贸mico

·         Violaciones

·         Incendios

La crisis circunstancial tiene cinco caracter铆sticas:

1) Es repentina: aparece de golpe.

2) Es inesperada: no puede ser anticipada.

3) Es urgente, pues amenazan el bienestar f铆sico o psicol贸gico.

4) Masiva: muchas crisis circunstanciales afectan a muchas personas al mismo tiempo (por ejemplo desastres naturales).

5) Peligro y oportunidad: la crisis puede desembocar en un mejoramiento o empeoramiento de la situaci贸n de la persona.

POLOS DE LAS CRISIS:

Se plantea que las crisis son inherentes al desarrollo y se manifiestan en dos polos: positivo y negativo. La resoluci贸n de la crisis del lado positivo significar谩 salud y corresponde al proceso de duelo; mientras que si se da del lado negativo significar谩 enfermedad y corresponde al trauma.

ETAPAS Y REACCIONES FRENTE A LA CRISIS:

Las crisis ocurren en una serie de etapas:

1) Se eleva la tensi贸n al comienzo por el impacto del suceso externo.

2) La tensi贸n aumenta m谩s porque no se puede enfrentar la nueva situaci贸n con la norma habitual de conducta.

3) Al incrementarse la tensi贸n, se movilizan otros recursos que pueden desembocar en varios resultados: reducci贸n de la amenaza externa, 茅xito en el enfrentamiento con la situaci贸n, redefinici贸n del problema, etc.

4) Si nada de lo anterior ocurre, la tensi贸n aumenta hasta provocar una grave desorganizaci贸n emocional.

Las reacciones frente a una crisis pueden ser al comienzo dos: llanto o negaci贸n de la crisis.

El llanto puede conducir a la negaci贸n o a la intrusi贸n. Esta 煤ltima significa sentirse invadido por sentimientos de dolor, im谩genes del impacto, pesadillas, etc.

La intrusi贸n lleva a la penetraci贸n, proceso donde se expresan, identifican y divulgan pensamientos, sentimientos e im谩genes de la experiencia de crisis. Implica definir problemas, tomar decisiones o aprender soluciones nuevas, movilizar recursos personales o externos, reducir efectos desagradables, etc. La penetraci贸n lleva la etapa final, que es la consumaci贸n, o integraci贸n de la situaci贸n de crisis dentro de la vida del individuo. La crisis puede dar como resultado un mejoramiento o un empeoramiento del sujeto.

 

LOS MOMENTOS QUE SE ATRAVIESAN EN LA CRISIS.

Cualquier teor铆a se presenta como un modelo para entender mejor las situaciones concretas de nuestra vida. Sin duda, cuando estas teor铆as se elaboran, se dan en el contexto de un grupo de experiencias espec铆fico.

Las crisis, se vinculan generalmente a una situaci贸n anormal, que produce des谩nimo o insatisfacci贸n; a la vez la experiencia nos indica que a cada una de ellas le sucede un cambio, por lo que, la crisis y el cambio se asocian regularmente. Lo cierto es que ante la crisis, los esfuerzos se dirigen a un futuro deseado.

As铆 tambi茅n se suele hablar indistintamente de crisis y conflicto, siendo esto 煤ltimo, el momento m谩s fuerte de un combate, una situaci贸n desgraciada que produce angustia por su dif铆cil soluci贸n. Se podr铆a decir que la crisis realiza una mirada de futuro a cerca del conflicto.

La preocupaci贸n fundamental radica en c贸mo responder cuando las crisis o los conflictos se presentan, es decir, c贸mo se maneja los momentos cr铆ticos en los grupos. Steve Fink, ofrece una teor铆a 煤til respecto al proceso de los cambios cuando estos surgen de una crisis. Este autor propone cuatro momentos, conmoci贸n, retroceso, reconocimiento y adaptaci贸n o cambio.

A cada momento del proceso la podemos identificar por la forma en que aparecen distintas dimensiones. Las que convienen considerar son: la comunicaci贸n, el tipo de liderazgo, la relaci贸n con otros grupos, el tono emocional que se da en la etapa, el nivel de planificaci贸n, as铆 como el tipo de actitud y de aprendizaje que le corresponde a cada una.

 

 

1.       CONMOCION.

En primer lugar resulta com煤n que una crisis o conflicto comience manifest谩ndose por un estado ca贸tico que paraliza el accionar normal y efectivo del grupo. Se llama conmoci贸n a ese estado en el que todo parece estar siguiendo una inercia sin mucho sentido, cuando da lo mismo que la experiencia se d茅 o no, es decir, cuando el grupo parece haber perdido significaci贸n y efecto.

En este momento, la comunicaci贸n es del tipo casual, es decir que lo que se tiene para decir o decirse se realiza fuera del grupo. No existe ning煤n liderazgo definido e identificado ni con el momento ni con el grupo, por ese motivo no hay intercambio o relaci贸n con otros grupos ya que nadie se puede sentir representativo. Se vivencia una ansiedad que provoca vac铆o y falta de sentido, en el 谩mbito emocional.

Como consecuencia de este panorama, el grupo no planifica nada y existe el caos. Los aprendizajes son de tipo violento, de shock, y la actitud que prevalece es la de ir solucionando los problemas en el momento, asumiendo una actitud de “bombero” o reactiva. Es aconsejable para acompa帽ar esta etapa, ofrecer las oportunidades para que las quejas se planteen en los 谩mbitos que corresponden, estimulando la revelaci贸n de sentimientos, con una actitud de aceptaci贸n, de comprensi贸n y emp谩tica.

 

2.       RETROCESO

En este momento le surge la necesidad de alcanzar una salida. Para lograrlo, nada mejor que recurrir a “la experiencia”, la cual se asocia f谩cilmente con el pasado. A este momento se le llama retroceso defensivo, ya que se vuelve atr谩s para encontrar una respuesta r谩pida y efectiva.

El nivel de comunicaci贸n se vuelve ritual, el discurso se dirige a “salvar” e intentar recuperar aquello que nos daba seguridad, como los roles predefinidos y las formas ya conocidas y tradicionales de actuar.

Esta caracter铆stica impone un liderazgo autoritario y normativo; o mejor dicho, este retroceso favorece este tipo de liderazgo. La relaci贸n dentro del grupo es representativa, pero dif铆cilmente se vea como participativa, es decir, el grupo deja en manos del l铆der las decisiones, es el que tiene las cosas claras.

La relaci贸n con otros grupos es de alienaci贸n, con una clara tendencia a uniformizar los estilos de organizaci贸n, es decir parecernos hasta perder la identidad.

Como en un principio las cosas marchan bien, el estado emocional del grupo es de euforia, todo parece haberse normalizado; inclusive la oposici贸n es contradependiente y refleja el mismo estado emocional sin propuesta alternativa.

Se planifica a corto plazo, el lema ser铆a seguro, r谩pido y pr谩ctico.

En esta etapa tradicional se corren tres riesgos; el primero ser铆a querer saltearla por desprecio a lo tradicional, si bien las formas normativas y autoritarias no llevan a la soluci贸n de una crisis, en este momento, lo tradicional viene cargado de valores y principios que el grupo debe recordar. El segundo es el enga帽o, es decir, que, bajo el disfraz del cambio, estos valores y principios, que son los que marcan el objetivo del grupo, se relativicen o desintegren, el grupo cree vivir un cambio y sin embargo sigue en la misma situaci贸n, con otra apariencia. Por 煤ltimo el estancamiento en la etapa, lo que es t铆pico cuando prevalece una actitud autoritaria, cuyo recurso t铆pico suele ser transformar la organizaci贸n en burocr谩tica, en la que el poder se esconde detr谩s del rol.

Los aprendizajes ser谩n del tipo de mantenimiento, reflejando la actitud de “avestruz”, es decir, por medio de la cual se desconoce la necesidad de un cambio profundo e innovador. Acompa帽ar esta etapa tampoco es f谩cil. En primer lugar implica aceptar la resistencia al cambio como una reacci贸n natural, orientando para que se revelen las frustraciones y ansiedades, a trav茅s de una atenci贸n sensible y cort茅s. El pasaje a una etapa m谩s avanzada del cambio lleva a remover es status quo, distribuyendo la informaci贸n de manera participativa, compartiendo las decisiones.

 

3.       RECONOCIMIENTO

El normal desarrollo de un proceso de crisis lleva a descubrir que los errores del pasado son los que nos trajeron a esta situaci贸n y por lo tanto no se encuentra en ese pasado la respuesta, aunque s铆 se puede reconocer como un punto de partida. Por lo general los que asumen un liderazgo autoritario, si no cambian su actitud, dejan de responder a las necesidades del grupo y caen. Estos ya no tienen los recursos para responder al grupo en forma efectiva, lo que choca con su estado de euforia emocional. Esta situaci贸n le deja lugar a quienes pretenden un camino que tenga m谩s en cuenta la realidad del grupo hoy que quiere proyectarse din谩micamente hacia el futuro

En primer lugar la preocupaci贸n por saber qu茅 piensan y sienten las personas del grupo permite una comunicaci贸n m谩s aut茅ntica, en la que existen las posturas cr铆ticas y cuestionadoras, y desde las cuales surgir谩n nuevas propuestas.

La pregunta ser铆a ¿qu茅 quiere la gente?, esto equilibra el estilo de liderazgo haci茅ndolo m谩s igualitario, es decir, no es uno el que dice lo que hay que hacer, sino que es una tarea de decisi贸n compartida. Todos los miembros del grupo empiezan a estar motivados por saber qu茅 pasa, hacia d贸nde queremos ir.

La movilizaci贸n de lo personal compromete m谩s a los miembros del grupo en la b煤squeda de soluciones, de cambio. Esto genera un estado emocional de ansiedad prospectiva, de esperanza. Esto permite una planificaci贸n a largo plazo, no se quiere dejar nada sin resolver, por lo tanto habr谩 que darse tiempo.

Esta apertura se manifiesta en una relaci贸n con otros grupos tendiente al intercambio, lo que va a ayudar a comparar y sugerir, teniendo en cuenta situaciones de crisis similares ya vividas por otros.

A esta etapa la llamamos experimental porque se recurre mucho a la investigaci贸n, encuestas, evaluaciones, etc. Es cuando se toma solo lo que es v谩lido para el grupo.

Es bueno recordar los riesgos, ya que la tendencia es a desechar todo lo viejo y tradicional, y con eso se puede diluir el sentido de esta experiencia grupal. Otro riesgo ser铆a que al comparar con otros busquemos trasladar o importar soluciones que nada tienen que ver con la realidad de este grupo. Y por 煤ltimo, el quedarse en lo te贸rico y buscar un perfeccionismo inexistente, y por mucho querer saber no se hace nada.

Es en esta etapa en que el grupo apunta hacia su identidad en la b煤squeda de valores compartidos, una misi贸n y una visi贸n construida juntos. A la luz de dicha identidad es que eval煤a su estado presente, gener谩ndose as铆 un estado de tensi贸n creativa para el cambio. Todo esto supone un tipo de aprendizaje innovador y una actitud “vig铆a”, es decir, prospectiva.

Para acompa帽ar esta etapa se sugiere proporcionar la informaci贸n y aclaraci贸n de las decisiones que se toman en forma participativa y consensuada. Se activaran los recursos para el cambio analizando y descubriendo las habilidades y capacidades necesarias para el mismo.

 

4.       CAMBIO

Por fin se alcanza el cambio que indica la resoluci贸n de la crisis. La participaci贸n de la gente, la informaci贸n acumulada, lo evaluado, lo comparado, el descubrirse cada uno en el grupo, permite que empiece a organizarse en forma m谩s funcional, y llega el momento de poner en pr谩ctica la transformaci贸n, el cambio. El liderazgo se va a adecuar a lo que el grupo necesita, es decir ser谩 adaptado a los objetivos y m茅todos que el grupo se plantea. Lo que llamamos comunicaci贸n funcional, es la que parte de la posici贸n que ocupa cada uno de los integrantes de este grupo.

El que cada uno pueda cumplir su rol (ejercer su poder), provoca en las personas un estado emocional de autoestima que se traduce en seguridad para el grupo. La relaci贸n con otros grupos es de cooperaci贸n, ya que el grupo se encuentra nuevamente en condiciones de realizar aportes positivos y funcionales al resto de la comunidad.

La resoluci贸n de una crisis, permite hacer crecer al grupo, en la medida que logra madurar, es decir ser realista, lo que para nosotros quiere decir contrastar de continuo, lo que queremos ser con lo que somos. Esta etapa se llama de estabilidad, ya que lo que se hace permanente es la actitud de apertura al cambio sin necesidad de detenerse para eso.

Persevera la actitud vig铆a y el aprendizaje innovador, dise帽ando nuevos sistemas y procedimientos, familiarizando al grupo con los recursos y materiales nuevos, considerando nuevos m茅todos y t茅cnicas. Lo que nos coloca en un plan de acci贸n concreto.

Las dos 煤ltimas etapas son las que proponen el eje de la Planificaci贸n estrat茅gica, cuya clave est谩 en la actitud vig铆a y el aprendizaje innovador.

 

 


 
Comunicaci贸n
Liderazgo
Relaci贸n con otros grupos
Tono emocional
Nivel de planificaci贸n
Actitud/ aprendizaje
Conmoci贸n
Casual
No hay
No existe
Ansiedad
No existe
Bombero – shock
Retroceso defensivo
Cohesi贸n ritual
Autoritario normativo
Alienaci贸n
Euforia
Corto plazo
Avestruz mantenimiento
Reconocimiento
Aut茅ntica
Igualitario
Intercambio informaci贸n
Ansiedad
Largo plazo
Vig铆a innovador
Cambio
Funcional
Adaptado al grupo
Cooperaci贸n
Seguridad autoestima
Contrastada realista
Vig铆a innovador

 


 

Complemento al tema: Intervenci贸n en crisis

 

El origen de la intervenci贸n en crisis moderna se remonta a los trabajos de  Eric Linderman del Massachusetts General Hospital, el cual desempe帽a un papel activo en la ayuda a los sobrevivientes y a los que perdieron a sus seres queridos en el incendio del Club Nocturno Coconut Grove el 28 de marzo de 1942, en el cual perecieron 439 personas.

 

El informe cl铆nico sobre los s铆ntomas psicol贸gicos de los sobrevivientes se convirti贸 en la piedra angular para las teorizaciones subsecuentes sobre el proceso del duelo y el significado de la crisis en la vida realizadas por Gerald Caplan, integrante del Massachusetts General Hospital, y del Harvard school of Public Health.

 

Por su parte Lopold Bellak utilizando su experiencia con los veteranos de la Segunda Guerra mundial (1946) public贸 en 1952 su primer art铆culo sobre psicoterapia breve en el  contexto de la psicoterapia de urgencia para la depresi贸n, en 1983 public贸 su cl谩sica obra “Manual de psicoterapia intensiva y de urgencia” de orientaci贸n psicoanal铆tica.

 

En 1963 el presidente Jhon F. Kennedy manifest贸 su prop贸sito de crear los Centros Comunitarios de salud mental, creando la escena para una revoluci贸n en la provisi贸n de los servicios de soporte psicol贸gico a los ciudadanos de los Estados Unidos.

Este acto de 1963 repercuti贸 en los servicios de salud mental, inici谩ndose la desinstitucionalizaci贸n de los servicios de salud mental por los establecimientos de los centros de servicios comunitarios, poni茅ndose un fuerte 茅nfasis en los servicios de prevenci贸n los cuales se basaban en la teor铆a de la intervenci贸n en crisis de  Gerald Caplan, la cual argumentaba la necesidad del uso de los paraprofesionales como un recurso de soporte de la misma comunidad.

 

Estos paraprofesionales eran voluntarios que ten铆an una capacitaci贸n de 40 horas a m谩s.

 

La base comunitaria de la intervenci贸n en crisis gozo grandemente de popularidad en muchas 谩reas entre los 60 a los 70, no obstante la esencia de los conceptos te贸ricos de la intervenci贸n en crisis siguen us谩ndose en la actualidad a pesar que la popularidad de los programas comunitarios basados en la intervenci贸n en crisis disminuyeron en 1980

 

Karl A. Slaikeu (1984) en su libro “Intervenci贸n en crisis” desarrolla estrategias de  tratamiento basadas en la “Terapia Multimodal de la crisis” construida sobre el modelo desarrollado por Lazarus (1976-1981) y en base a la perspectiva Cognositiva (Beck 1976, Ellis y Harper 1961, Mahoney 1974).

Esta terapia multimodal de la crisis examina aspectos conductuales, afectivos, som谩ticos y cognositivos de cualquier crisis.

Slaikeu manifiesta que la intervenci贸n en crisis se puede dividir  en intervenci贸n de segundo orden o terapia en crisis y la intervenci贸n de primer orden o Primera Ayuda Psicol贸gica.

 

 

 

Modalidades:

 

La intervenci贸n en crisis tiene dos modalidades:

·         Primeros auxilios emocionales, dise帽ados para ayudar, de manera inmediata, a las personas a restaurar su equilibrio y adaptaci贸n psicosocial. Por lo general, es ofrecido por personal no especializado el cual entra en contacto con las v铆ctimas en los primeros momentos despu茅s del desastre u evento traum谩tico en cuesti贸n.

·         Intervenci贸n especializada o profesional para emergencias psiqui谩tricas.

 

Objetivos de la intervenci贸n en crisis:

·         Detener el proceso agudo de descompensaci贸n psicol贸gica, aliviando las manifestaciones sintom谩ticas y el sufrimiento.

·         Estabilizar al individuo y protegerlo de estr茅s adicional, reduciendo los sentimientos de anormalidad o enfermedad.

·         Evitar complicaciones adicionales.

·         Restaurar las funciones ps铆quicas y readaptar a la persona a las nuevas condiciones, tan r谩pido como sea posible.

·         Prevenir o mitigar el impacto del estr茅s postraum谩tico.

·         Facilitar u orientar la asistencia profesional a mediano o largo plazo, si fuera necesario.

Los estudios y las experiencias de trabajo en emergencias nos muestran que el enfoque adecuado para entender e intervenir en la situaci贸n de crisis es el de la salud mental comunitaria.

Los principios fundamentales, de la salud mental comunitaria, v谩lidos para la intervenci贸n en crisis en emergencias son:

·         Necesidad de rescatar los recursos de salud presentes en las personas.

·         La noci贸n de crisis, como etapas de la vida por las que todo ser humano atraviesa.

·         Implicaciones t茅cnicas, sociales y pol铆ticas de la intervenci贸n en crisis.

·         Socializar los conocimientos.

·         La comunidad es el nivel de intervenci贸n m谩s complejo e importante para la salud mental.

·         Necesidad de transformar nuestras propias actitudes.

·         Construir respuestas concretas para personas concretas en situaciones concretas.

·         Idea de la rehabilitaci贸n vinculada a la cotidianidad.

·         La dimensi贸n del trabajo en equipo.

 

Estrategias y recursos t茅cnicos fundamentales de la intervenci贸n en crisis

Generales:

La intervenci贸n debe ser temprana y eficiente: inmediatez en la atenci贸n y proximidad f铆sica.

·         Objetivos bien definidos a corto plazo, con expectativas realistas. La intervenci贸n ser谩 dirigida a reducir s铆ntomas y estabilizar la situaci贸n psicol贸gica de la persona, no es un procedimiento m谩gico que borra las experiencias vividas.

·         Procedimientos simples y bien orientados.

·         T茅cnicas de m煤ltiple impacto: movilizar todos los recursos (profesionales, sociales, familiares e individuales) disponibles.

·         Pragmatismo y flexibilidad.

·         Enfoque integral, adem谩s de la acci贸n curativa o asistencial debe enfocarse con perfil preventivo y perspectiva social.

Recursos t茅cnicos espec铆ficos:

·         Apoyo humano y empat铆a. Fortalecer la solidaridad grupal, familiar y social.

·         Racionalidad.

·         Reestructuraci贸n y reorientaci贸n de la vida de las personas ante la situaci贸n ca贸tica experimentada. Aprender a ver o repensar acerca del incidente cr铆tico, de una forma menos t贸xica para contrarrestar la emoci贸n excesiva.

·         Expresi贸n abierta de emociones y verbalizaci贸n del trauma, lo cual ayuda a la reducci贸n de s铆ntomas. Muchas de las t茅cnicas de tratamientos de las reacciones postraum谩ticas se basan en la habilidad de las personas para reconstruir e integrar las memorias traum谩ticas, usando la expresi贸n verbal.

·         Comprensi贸n de la p茅rdida de control como una posible reacci贸n normal ante una situaci贸n anormal.

·         Resoluci贸n de problemas concretos de la vida de las personas.

·         Uso de recursos espirituales o de fe y religiosidad. Las intervenciones en crisis basadas en la ayuda espiritual ofrecen perspectivas muy favorables cuando son bien conducidas.

·         Uso de recursos profesionales y especializados cuando sea necesario.

Desde el punto de vista pr谩ctico la intervenci贸n en crisis puede incluir:

·         Educaci贸n y preparaci贸n preincidente.

·         Intervenci贸n individual en la crisis.

·         Intervenci贸n familiar en la crisis.

·         Intervenci贸n espiritual (pastoral) en la crisis.

·         Intervenci贸n para grupos peque帽os de v铆ctimas primarias, secundarias o terciarias (los directamente afectados, sus familiares y amigos cercanos, socorristas y personal de ayuda humanitaria).

·         Informaci贸n para el manejo de la crisis en grupos grandes de v铆ctimas primarias.

·         Programa de soporte en desastres para socorristas y personal de ayuda humanitaria que actu贸 directamente en la emergencia.

·         Mecanismos de seguimiento y para referir a los sobrevivientes con personal especializado.

Tambi茅n se han descrito algunas modalidades espec铆ficas:

·         Selecci贸n o triaje: procedimiento para selecci贸n y atenci贸n de casos inmediatamente despu茅s del desastre, logrando una disminuci贸n de la desorganizaci贸n cognoscitiva y emocional. El procedimiento est谩 directamente relacionado con los primeros auxilios emocionales.

·         Desactivaci贸n o defusing: Es una versi贸n sintetizada del debriefing. Se emplea dentro de las primeras 12 horas despu茅s del evento traum谩tico, para grupos peque帽os de v铆ctimas primarias, secundarias o terciarias.

·         Desmovilizaci贸n o debriefing seg煤n se帽alan algunos autores, se emplea despu茅s de 12 horas de ocurrido el evento traum谩tico. Se sustenta, b谩sicamente, en el principio de compartir experiencias traum谩ticas con un componente educativo a帽adido. Es importante la confidencialidad y la ausencia de juicios y cr铆ticas.

·         Outreach: procedimiento para encontrar las v铆ctimas, ayud谩ndolas a expresarse y comprender las reacciones emocionales como consecuencia del desastre.

 

Qu茅 hacer y qu茅 No hacer durante la intervenci贸n en crisis.

Qu茅 hacer:

·         Desarrollar el sentido de escucha-responsable. Escuchar atentamente, sintetizando brevemente los sentimientos del afectado. H谩galo sentir que usted lo entiende y comprende por lo que est谩 pasando, esto es la empat铆a.

·         Ser cort茅s, honesto y transparente; ganarse la confianza y cooperaci贸n del afectado.

·         Ser realista y objetivo.

·         Favorecer la dignidad y libertad para que las v铆ctimas trabajen en sus problemas.

·         Fortalecer la confianza y seguridad.

·         Estar alerta sobre las oportunidades de dar 茅nfasis a las cualidades y fuerzas de la persona.

·         Aceptar el derecho de los afectados de sentirse as铆.

·         Realice preguntas saludables y efectivas.

·         Pida una retroalimentaci贸n para ver si est谩 usted comprendiendo.

Reglas del NO:

·         No ofrecer algo que no pueda cumplir.

·         No le tenga miedo al silencio, ofrezca tiempo para pensar y sentir.

·         No se sienta in煤til o frustrado. Usted es importante y lo que est谩 haciendo vale la pena.

·         No muestre ansiedad ya que 茅sta puede ser f谩cilmente transmitida a los afectados.

·         No ofrezca respuestas, m谩s bien facilite la reflexi贸n.

·         No permita que el enojo u hostilidad de la persona lo afecte.

·         No los presione a hablar de Dios, sea comprensivo con las creencias religiosas.

·         No tenga miedo de admitir que el afectado necesita m谩s ayuda de la que usted le puede brindar. Puede referirlo a profesionales especializados.

·         No permita que las personas se concentren 煤nicamente en los aspectos negativos de la situaci贸n.

·         No muestre demasiada l谩stima o paternalismo. Tampoco se exprese de manera autoritaria o impositiva. Busque un punto intermedio entre estas dos posiciones.

·         No espere que la v铆ctima funcione normalmente de inmediato.

·         No confronte a una persona en crisis, si este se va a sentir amenazado.

·         No insista con preguntas m谩s all谩 del punto en que la persona no desea hablar.

·         No trate de interpretar las motivaciones ocultas de un comportamiento.

·         No moralice o sermonee.

·         No intente progresar demasiado r谩pido en el proceso de intervenci贸n en crisis.

·         No considere superficialmente las amenazas de suicidio u homicidio.

·         No aliente a alguien a hacer algo que en realidad no quiere hacer

 

Modelo de intervenci贸n en crisis para desastres

 

Despu茅s del terremoto de ciudad de M茅xico del 19 de octubre de 1985, el Instituto Mexicano de Seguridad Social, empez贸 un programa de intervenci贸n en crisis destinado a ofrecer apoyo psicol贸gico a las v铆ctimas y damnificados (Pacheco Regis 1987), la estrategia en t茅rminos generales consist铆a en:

                1.-          Facilitar la expresi贸n verbal

                2.-          Favorecer la catarsis

                3.-          Ayudar a superar la negaci贸n

                4.-          Combatir el negativismo

                5.-          Tolerar las conductas de enojo

6.-          Evitar la inactividad (que es alto riesgo para los individuos o los grupos                humanos en duelo).

                7.-          Ejercitar la imaginaci贸n en situaciones futuras.

 

Teniendo en cuenta estas directrices se dise帽o una estrategia de acci贸n por niveles, que contemplaba la atenci贸n grupal y la individual, en la cual los casos leves y moderados eran atendidos oportunamente por personal no profesional y los casos graves eran enviados a los profesionales. La atenci贸n individual o grupal se completaba con un programa de participaci贸n comunitaria que promov铆a y fomentaba la autoresponsabilidad y la autosuficiencia.

 

Para poner en marcha este programa es necesario capacitar personal profesional y no profesional en el manejo de un instrumento de identificaci贸n de problemas emocionales y en t茅cnicas sencillas de intervenci贸n psicol贸gica. Todo el personal debe ser altamente motivado para evitar la crisis en s铆 mismos y estimular el trabajo.

 

 


 

REFERENCIAS BIBLIOGR脕FICAS

 

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 http://ipes.anep.edu.uy/documentos/curso_dir_07/modulo4/materiales/crisis.pdf

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